Perdición
Quemándome el hipotálamo
Deseo irrefrenable que navegas y naufragas en mi piel. Fuego ardiente que me quema la lógica y el raciocinio. Incomprensible perversión que ha anidado entre mis piernas. Que confusamente claro que es el capricho de tenerte aprisionada entre mis brazos, hundiéndome en tu calor interior embistiendo una, dos, tres, cuatro veces, bailando en tu/mi cintura, cual desesperado baila para sobrevivir. Qué poco importan las situaciones varias, cuando el ahora arrasa y me quema el hipotálamo, empujándome inevitablemente hacia la perdición más absoluta entre tus piernas.
0 comentarios